Respuesta :

zielo
Todo comienza un día en que el acróbata Hugo Brinkerhof , componente de la compañía “Atlas & Cia”, tras terminar de ensayar un número con Myra, una guapísima acróbata con la que estaba casado, sale rápidamente a unos asuntos con Bregman, el contratista, hechas las gestiones, vuelve a la pensión donde se hallaban alojados, sin embargo, Myra no estaba ni apareció en toda la noche.Hugo, preocupado decide llamar al capitán de la policía al que tuvo que convencer para que enviara a un agente, finalmente mandó a Baldy un policía de barrio o al que acompañaba otro más fornido. A la mañana siguiente, cuando Perk, el encargado de abrir el teatro llegó, tanto Baldy como el otro agente quedaron asombrados de lo que había ocurrido en el camerino, Myra había sido asesinada, estaba colgada de una tubería de incendios y con el brazo y las piernas atadas.Para investigar este espantoso y extraño suceso eligieron a Ellery Queen, un joven inspector hijo del también inspector Richard Queen; que inmediatamente convocó a los componentes de la compañía: Ted Crosby el cowboy-cantante, Gordy el ilusionista el pequeño Sam el cómico y a Joe Kelly. El inspector Ellery comenzó interrogarlos a uno tras otro sin averiguar nada de interés hasta llegar a Kelly quien parecía saber demasiado sobre Myra, esto hizo que su marido el acróbata Hugo Brinkerhof, se abalanzara sobre él teniendo que ser desalojado, lo que Joe Kelly sabía era que Gordy y Myra habían mantenido una relación como amantes, lo que dejó a todo el mundo perplejo.El siguiente paso fue analizar el cuerpo de la victima y su habitación, allí consiguió encontrar cuatro instrumentos que podía haber utilizado el asesino, pero que sin embargo no utilizó. Por otra parte, el doctor Prouty el forense del caso, descubrió que el nudo de su cuello era poco corriente y se llevó el cuerpo el cuerpo a su laboratorio para examinarlo con más detenimiento.Gracias a la declaración del viejo Perk, conocieron que la puerta trasera del teatro había estado abierta por ordenes de Brinkerhof, lo que desconcertó al inspector, quien tras interrogar al resto de artistas prefirió seguir investigando. El espectáculo continuaba, los inspectores infiltrados merodeaban pero sin llamar la atención y entre bastidores, con unos gemelos conseguidos por Kelly, el inspector Queen y su hijo observaron las distintas actuaciones de Atlas y Cia, la de Sam el marinero, la de Tex Crosby y finalmente la de Gordy, el ilusionista, cuyo truco final les sirvió para descubrir una pista muy destacable. En este número, Gordy hacía un nudo exactamente igual al que usó el asesino para atar a Myra, y el mismo que ésta empleaba para atarse al trapecio mientras estaba en el aire; sin embargo, llegó a la conclusión de que el asesino no podía ser Gordy, ya que habría dejado una pista demasiado fácil para la policía. Mas tarde apareció el doctor Prouty con al solución definitiva al caso, o por lo menos para Ellery, se habían descubierto huellas en el cuello de la victima y lo más especial era que estaban del revés. El joven detective tenía la solución pero no quiso desvelarla hasta llegar al Metropole y reunirlos a todos. Ellery amenazó con decir quien era el culpable si él mismo no lo desvelaba y así lo hizo, explicó como el asesino había marcado sus huellas en el cuello del revés y que tras esto había colocado la cuerda con el nudo de la misma forma que lo hacía Gordi para despistar a la propia policía. Instantes antes de que el detective terminara, el propio autor del crimen confesó, Brinkerhof lo hizo tras ver que le era infiel con Gordi la asesinó esa misma noche. El final se resume como una noticia del periódico, “El caso del nudo gordiano”.