En teoría, la globalización permite que se derrumben preceptos sociales negativos al unificar a la mayor cantidad de población posible a través del consumo de bienes y servicios.
No obstante, si se entiende desde un punto de vista práctico, la desigualdad en la riqueza concierne un muro que derribar, debido a que en lugares se gana menos dinero y son más económicos para producir bienes y servicios que luego se llevan a lugares de mayor costo.